30 de junio de 2022

Los golpes de calor son comunes entre julio y agosto.

Se debe tener especial cuidado en los días en que las temperaturas aumentan repentinamente, como en los días soleados durante la temporada de lluvias.

Para empezar, tenga en cuenta estos cuatro consejos.

1. Beba líquidos incluso si no tiene sed.

2. Utilice ropa transpirable

3. Cuando esté en ambientes cerrados, ventile las habitaciones y use aire acondicionado para controlar la temperatura.

4. Haga ejercicio moderado en su rutina diaria para promover la sudoración.

Los golpes de calor también deben prevenirse mientras se vive en esta "nueva normalidad", así que haga lo siguiente:

• Asegure una distancia de 2 metros o más entre usted y los demás cuando se encuentre al aire libre y entonces puede quitarse la mascarilla para reducir el riesgo de un golpe de calor.

• Cuando use una mascarilla, evite el trabajo pesado y el ejercicio, y tenga cuidado de rehidratarse regularmente. También debe quitarse la mascarilla y tomar descansos de manera adecuada.

• Trate de ventilar las habitaciones usando extractores o abriendo las ventanas, incluso cuando esté tratando de enfriar la habitación. La temperatura ambiente aumentará durante la ventilación, así que ajuste con frecuencia la configuración de la temperatura del aire acondicionado.

• Se debe mantener un control diario de la temperatura corporal y otros controles de salud no solo para prevenir una infección por COVID-19 sino también para prevenir los golpes de calor. Si se sintiera mal, no se exceda, quédese en casa y descanse.

• Al mismo tiempo que evita los lugares concurridos, el contacto cercano y los espacios cerrados, intente prestar atención y controlar a las personas que son propensas a sufrir golpes de calor, como las personas mayores, los niños y las personas con discapacidades.

Haga un esfuerzo para mantenerse en buenas condiciones físicas.